Tras haber asistido a una ponencia sobre la inteligencia artificial, cuyos ponentes fueron Miguel Rebollo y Javier Oliver, a continuación, voy a realizar un comentario sobre este tema de actualidad, ofreciendo mi punto de vista y mi visión de cara al futuro.
En primer lugar, es necesario clarificar que es la inteligencia artificial, porque gran parte de la sociedad tiene un concepto erróneo y únicamente piensa en los robots con forma humanoide que van a acabar con nosotros. Es mucho más simple y a la vez complejo que ese concepto, hoy en día, la inteligencia artificial nos rodea, y no hace falta que sea a través de cosas tangibles, ya que, la mayoría de ella está presente en las aplicaciones/programas que utilizamos en nuestros dispositivos. En la actualidad hasta la aplicación de “Laliga” utiliza inteligencia artificial, y esto significa analizar mayor cantidad de datos y con una rapidez infinitamente superior a la tecnología anterior, lo cual permite adaptar productos/servicios a cada tipo de persona, es decir, la personalización.
El principal problema que existe en esta implementación de la inteligencia artificial es la protección de los datos, ¿Dónde está el límite de nuestra privacidad? Esta es una pregunta que se repiten los especialistas en este ámbito, ya que hoy en día al aceptar la política de privacidad, tus datos están disponibles para los propietarios de la aplicación, y en función de cual es su actividad, tus datos serán almacenados y analizados, o cedidos a terceros. Es un hecho, que cada vez nuestra privacidad se reduce, pero no toda la culpa es de las empresas ya que, nosotros, seamos conscientes o no, ponemos nuestra información privada en ciertas aplicaciones. De este modo, es importante adaptar y regular las leyes actuales de privacidad y protección de datos en función del progreso tecnológico.
Por otro lado, la inteligencia artificial, es clave para muchas empresas para poder permanecer en el mercado, ya que, nuestras necesidades han cambiado, o, mejor dicho, han aumentado, y procesar esos datos mediante la capacidad humano a parte de ser económicamente costosa, es lenta y poco precisa. Esta demostrado que la inteligencia artificial de la actualidad procesa muchos mas datos y en un espacio mucho mas reducido de tiempo que un humano, y es por eso que muchas empresas deben digitalizarse, implantando la inteligencia artificial, no como un complemento, sino como un pilar básico. ¿Entonces, el digitalizar la empresa destruirá puestos de trabajo? No, exactamente. Es evidente que los puestos de trabajo clásicos han ido desapareciendo a medida que la tecnología ha ido avanzando, pero es cuestión de adaptarse y evolucionar todos al mismo ritmo, el aferrarse a algo obsoleto va a dejarte fuera del mercado o con una rentabilidad muy por debajo a la de la competencia. Un claro ejemplo de ello fue la primera revolución industrial, la cual causo furor por parte de la sociedad, ya que tenían la misma visión que la que existe hoy en día, la de nos va a destruir el empleo. Esta claro que desaparecen puestos de trabajo, pero hay que tener claro que aparecen nuevos, todos esos nuevos procesos y conocimientos no se implementan solos, y mucho menos se crean y diseñan, es por eso que, con el desarrollo de la tecnología, han surgido nuevos estudios y, por tanto, nuevos puestos de trabajo adaptado a esta, en definitiva, se podría decir que no se destruyen puestos, sino tipos de trabajo.
Ahora bien, ¿Es posible predecir como será nuestra vida de aquí 50 años? Es muy poco probable, debido a la cantidad de innovaciones disruptivas en el mundo tecnológico, es decir, no puedes predecir algo que no conoces. Un claro ejemplo de ello son nuestros familiares más mayores, ellos creían que con la entrada del nuevo milenio los vehículos serían capaces de volar y la sociedad estaría formada por animales, personas y “ciborgs”. De este modo, por muy bien que conozcamos la tecnología actual y sus limitaciones, es impredecible tanto el futuro lejano como el próximo. Como bien aseguraban los ponentes, esa visión futura de convivir con robots está más cerca de lo que pensamos, ya que, la mayor parte de los electrodomésticos y otros aparatos ya tienen integrados de inteligencia artificial aunque nosotros no seamos conscientes de ello, además, recalcaban que no hace falta que un robot tenga forma humanoide, es decir, anticipaba un tipo de robot que podría aparecer en los años próximos, concretamente, el de cocina, que consistiría en una estructura mecánica con un sistema de inteligencia artificial que tendría la capacidad de cocinar en función de nuestras necesidades o gustos.
A pesar de eso, en mi opinión, el avance y creación de este tipo de productos/servicios con inteligencia artificial, es debido a nuestra comodidad y las nuevas necesidades. La mayor parte de la sociedad está olvidando ciertas tareas básicas en la vida cuotidiana y esto puede repercutir gravemente en su supervivencia en caso de que haya una catástrofe tecnológica, a parte de limitar la creatividad como consecuencia del sedentarismo o pereza. Es un hecho que la inteligencia artificial nos ayuda más de lo que creemos y en ocasiones es necesaria, pero debemos distinguir entre que abarca la tecnología y que abarcamos nosotros, sin olvidar lo que somos, personas. Me gustaría recalcar que la inteligencia artificial actualmente es superior a la humana, pero carece de una cosa importante que los humanos poseemos, es decir, los sentimientos/emociones. Porque, como bien sabemos, la gran mayoría de nuestras decisiones han sido tomadas en función de nuestros conocimientos y experiencia, pero también de nuestras emociones, algo que actualmente no pueden predecir la inteligencia artificial, aunque no dudo que lo haga en un futuro próximo. En definitiva, convivamos con la tecnología sin dejar de lado lo que nos hace únicos, las emociones y la racionalidad.
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